Carlos Alberto Aguirre
Hoyos, quien se desempeñaba como pastor de una iglesia cristiana en el
municipio de Medina (Cundinamarca), fue asegurado ayer por un juez con
funciones de control de garantías, luego que la Fiscalía le hiciera
imputaciones por su presunta responsabilidad en los delitos de acceso carnal y
actos sexuales abusivos con menor de 14 años.
Los hechos investigados
ocurrieron en septiembre de 2013, cuando una señora que asistía al culto
denunció a Aguirre Hoyos porque, supuestamente, habría manipulado indebidamente
a una niña de 11 años. En desarrollo de la investigación, apareció otra
víctima, en circunstancias que son objeto de estudio por parte de fiscales del
Centro de Atención e Investigación Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas)
de Villavicencio.
Aguirre fue capturado
por miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de Villavicencio, el 31
de marzo último, en el municipio de Medina (Cundinamarca).
En las audiencias el
procesado no se allanó a los cargos y fue remitido a la cárcel de la capital
del Meta.