Según las autoridades,
37 personas han muerto por estos artefactos en el departamento.
Un grupo de 60 hombres
del equipo Exde del Ejército, especializado en el manejo de artefactos
explosivos, y 30 uniformados más encargados de la seguridad, adelantan el
desminado asistido en Bojayá, Chocó. La descontaminación inició en el
corregimiento Pogue, donde 300 paramilitares habrían irrumpido a finales del
año anterior.
El comandante de la
Séptima División, general Juan Carlos Ramírez Trujillo, señaló que el desminado
asistido es realizado por el Ejército Nacional y la Oficina del Alto
Comisionado para la Paz. El objetivo es que las comunidades indígenas y
afrodescendientes que se han confinado, salgan a recoger sus frutos y a sus
actividades cotidianas en el campo.
"Ya ingresaron los
90 hombres que van a hacer este desminado en la comunidad de Pogue en Bojayá.
Van a estar en forma cercana con la comunidad e identificando las áreas donde
hay presencia de artefactos explosivos que generan temor en nuestra población
civil", señaló el alto oficial.
El plan piloto de
desminado asistido no se ha utilizado en ningún otro territorio. Por primera
vez, la descontaminación de estos artefactos se adelanta en una zona donde
continúa la presencia de los grupos armados ilegales, como es el caso de
Bojayá.
En Chocó, 166 personas
han sido víctimas de las minas antipersonal, de las cuales, 37 han muerto y las
demás, han quedado con graves heridas y amputaciones, según la Oficina del Alto
Comisionado para la Paz.
El presidente Iván
Duque se comprometió a aumentar la
presencia militar y la inversión social en Bojayá, donde operan la guerrilla
del ELN y las Autodefensas Gaitanistas
(AGC), que ponen en riesgo constante a los habitantes del departamento
del Chocó.
"Venimos, también,
no solamente con la fuerza pública, sino con la intervención social para que
aquí se sienta la presencia del Estado. Sabemos que por muchos años se ha
presentado abandono a muchas de estas comunidades", afirmó el mandatario.