La Superintendencia de
Sociedades aceptó el proceso de reorganización para la sociedad 'Don Jediondo:
Sopitas y Parrilla S.A.S'. Esto después que la cadena de restaurantes
argumentara que tiene grandes inconvenientes económicos para seguir
funcionando.
Debido a esto, se realizará
una reestructuración administrativa que incluye el cierre de siete restaurantes
en Bogotá, Cartagena y Santa Marta, así como la reducción de su planta de
personal en un 10%.
Entre los locales que
cerrarán sus puestas se encuentran: Plaza de Las Américas, Tunal, Galerías
(Bogotá), Soledad, Antares, Soacha (Cundinamarca), Bocagrande (Cartagena) y
Arrecife (Santa Marta).
En el auto No.
2020-01-028142 se reconoce que la Sociedad cuenta con obligaciones por un valor
de $ 8.679.445.908. Igualmente, se indica la reestructuración para la forma en
cómo se le pagará a los proveedores y finalizar los contratos de arrendamiento,
principalmente en centro comerciales.
En su petición, los
restaurantes presentaron cifras que permitieron establecer una disminución en
sus ventas desde el año 2013 por cada local. Los documentos revelan además que
existen resultados netas en perdida por el ingreso de grandes competidores en
la categoría de "comida típica" que ofrecen precios más bajos.
La compañía registró pérdidas
al cierre del año pasado y las atribuye, entre otras cosas, al hecho de que
está pagando más IVA, las ventas en sus restaurantes están cayendo desde 2013 y
el paro camionero de 2016 hizo que se disparara el costo de los alimentos para
preparar sus platos típicos.
En el 2016, se indica, se
presentaron varias situaciones que aumentaron la crisis. Además del paro
camionero -que se extendió por dos meses- los cambios ambientales aumentaron el
valor de la materia prima agrícola que utilizan para sus platos, lo que generó
un aumento considerable en el gasto logístico y perdidas económicas.
Un año después, la Dirección
de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) adelantó el embargo de las cuentas
bancarias de la cadena, lo que aumentó la crisis financiera "con relación
al flujo de caja".
La Superintendencia ordenó
realizar una serie de acciones con el fin de mejorar las condiciones
financieras de la Sociedad, mejorar el flujo de caja y convertir la inversión
en activos de mayor liquidez.
Igualmente se le pide a la
Sociedad -que tiene como imagen y uno de sus principales accionistas al
reconocido humorista Pedro González- abstenerse de realizar enajenaciones que
no estén comprendidas en el giro ordinario de sus negocios, ni constituir
cauciones sobre bienes del deudor.
Tampoco podrá "hacer
pagos o arreglos relacionados con sus obligaciones, ni adoptar reformas
estatutarias ni, en general, adelantar operaciones societarias o contractuales
que supongan erogaciones reales o potenciales a cargo de la sociedad".
Los representantes de la
Sociedad deberán realizar una actualización del inventario de activos y
pasivos, con su respctiva documentación y estractos financieros.