D Notillano.
Santa Bárbara de Arauca. Indignación en diferentes sectores y organizaciones defensoras de animales ha causado las condiciones infrahumanas en las que se encuentra un grupo de animales ueron confiscados por la policía nacional al constatarse que la mayoría procedían de territorio venezolano sin las medidas sanitarias correspondientes.
Para esa fecha, las
autoridades catalogaron la operación como exitosa, aduciendo que los 211 burros
y 5 caballos serían llevados a ciudades del interior del país donde serían
comercializados y su carne puestas en los mercados mayoristas de la capital del
país y Villavicencio.
Eran transportados en
camiones y carecían de la documentación, y fueron interceptados en la vía al
corregimiento de El Caracol, sector de Los Arrecifes, zona rural del municipio
de Arauca.
Los entregaron al, ICA
quienes transportaron los animales hasta los corrales de la manga de Coleo
Chapín Bello donde se presentó la calamidad, muchos de ellos murieron, unas
burras abortaron por la física hambre, falta de agua y de cuidados médicos.
De los 216 animales
retenidos, 102 permanecen en los corrales, otros 7 han muerto por las precarias
condiciones de salud, abandono y la falta de atención médica, mientras que
otros 107 se encuentran desaparecidos.