Está próximo a ser
citado para que responda por cinco otrosíes que se dieron durante el tiempo que
estuvo en el IDU.
De: Sylvia Charry, Blu
Radio
Se trata de Héctor
Jaime Pinilla Ortíz, asesor del despacho del fiscal general, Néstor Humberto
Martínez, y quien tiene a su cargo uno de los casos más importantes para la
Fiscalía: Hidroituango. Además, asesora la bandera de Martínez que es
‘Bolsillos de cristal’, el programa dedicado a perseguir la corrupción en el
país.
Pinilla Ortiz es
investigado por la propia Fiscalía que ahora representa, en medio del ‘carrusel
de la contratación’ de Bogotá, mientras estuvo en el IDU. Incluso, está próximo
a ser citado para que responda por cinco otrosíes que se dieron durante el
tiempo que estuvo en esa entidad.
El hoy asesor del
fiscal general fue el director jurídico en la ERU y del IDU, cuando Néstor
Eugenio Ramírez dirigía las entidades durante el mandato del exalcalde Samuel
Moreno. Según fuentes, Ramírez, fue quien lo puso en las dos entidades como su
persona jurídica de confianza.
Por esos contratos,
actualmente, Néstor Eugenio Ramírez tiene las mismas dos investigaciones en la
Fiscalía por presuntos actos de corrupción en esas dos entidades y está próximo
a ser llamado a imputación de cargos.
Incluso, según Emilio
Tapia, Ramírez llegó a esas dos entidades “1000% puesto” por él y cumplió con
sus pedidos.
Según declaraciones de
los condenados Emilio Tapia y de Inocencio Meléndez, mientras estaban en el IDU
firmaron el otrosí número 6,7,8, 9 y 10 del contrato 137 de Transmilenio por la
26, otrosíes que terminaron beneficiando a los contratistas y con los que se
perdieron miles de millones de pesos de recursos públicos.
Los otrosíes
Según fuentes del proceso, cuándo Ramírez y
Pinilla llegan al IDU encontraron que el contrato 137 se lo habían quitado a la
Unión Temporal Transvial del Grupo Nule y se lo cedieron al Grupo empresarial
Vías Bogotá, de Andrés Jaramillo.
Ellos hicieron el otro sí número 6 con el
cual, según la Fiscalía, “modificaron el precio del contrato a 94.000 millones
más, se excluyeron obras y se amplió el tiempo a 16 meses más”.
Es decir, según la Fiscalía “la entidad pública solventó al
contratista”.
Además, firmaron el otrosí número 7, 8, 9 y 10 con el cual aprobaron el
presupuesto que el contratista quiso para el mismo contrato que fue 150.000
millones de pesos y además, les excluyeron obras. Por estos hechos está en
juicio el expresidente de Conalvias, Andrés Jaramillo.
Pinilla tenía tal grado
de confianza con Ramírez que, después de su renuncia al IDU, quedó como
director encargado de la entidad durante unos meses.