El exjefe paramilitar,
alias 'Don Mario' extraditado a Estados Unidos, se declaró ante un juez federal
de Nueva York, inocente de conspirar para traficar toneladas de cocaína a ese
país.
Daniel Rendón Herrera,
alias 'Don Mario' de 54 años, fue capturado hace nueve años y solamente se dio
su extradición hasta esta semana.
Al ser entregado a las
autoridades de EE. UU, le expusieron dos de los cargos por los que está allí,
el primero y por el único que podrá ser juzgado es de una empresa criminal que
enviaba múltiples toneladas de droga a Estados Unidos vía México y
Centroamérica de 2003 a 2014. Este delito tiene una pena mínima de 20 años de
cárcel y máximo de cadena perpetua.
Por su parte, el
segundo cargo en su contra es uso de armas de fuego para el narcotráfico.
Rendón compareció por
primera vez en un tribunal estadounidense ante el juez Viktor Pohorelsky en la
corte federal de Brooklyn. La audiencia fue muy breve y el acusado siempre
estuvo de pie.
Cuando el Magistrado le
preguntó si se declaraba culpable o no de los cargos, el exjefe paramilitar le
respondió en español "inocente, señoría".
'Don Mario' es
representado por la abogada Johanna Zapp, experta en casos de extradición a
Estados Unidos, y ella fue quien recordó que su cliente necesita medicamentos
para el colesterol y para regular la presión.
Zapp, que no pidió
fianza porque las reglas de extradición no lo permiten, también dijo al juez
que su cliente no parece leer bien, por lo cual solicitó un examen visual.
"Don Mario fue el
narcoterrorista más temido de Colombia", afirmó el agente especial de la
DEA James Hunt, a cargo del caso, en un comunicado. "Es conocido como el
hombre que encendió el reino del terror del Clan Úsuga al tiempo que asedió a
Estados Unidos con cientos de toneladas de cocaína".
Según la Fiscalía,
Rendón fue el fundador y uno de los principales jefes del Clan Úsuga (antes
conocido como Los Urabeños y luego como el Clan del Golfo), la mayor banda
criminal de Colombia.
La próxima audiencia
con mira a su juicio, tendrá lugar el 21 de mayo ante la jueza Dora Irizarry.