La comunidad agradece el acompañamiento de los académicos y
reconoce la importancia de que la Universidad haga sus aportes y genere
estudios a partir del caso.
Tras las denuncias hechas por habitantes de La
Madrid y la solicitud de apoyo, el programa de Biología realiza acompañamiento
para la protección del humedal y la ronda hídrica adyacente al barrio.
La siembra de
moriches, jornadas de limpieza y la
realización de los primeros análisis de las especies presentes como fuente de
bienestar ecológico y de la misma comunidad, son algunas de las acciones
adelantadas a fin de contrarrestar los daños ocasionados por las actividades de
construcción de Villavivienda y de otros implicados que le han dado uso
incorrecto a ese ecosistema.
Según explicó la
profesora de Unillanos Martha Lucía Ortiz Moreno, el inconveniente radica en
que la reserva del humedal de La Madrid no está creada, ni cuenta con
personería jurídica. Para lograr su reconocimiento oficial de parte de
Cormacarena es necesario caracterizar las especies y constatar su importancia
tanto para la comunidad como para el paisaje, una labor en la que docentes del
programa de Biología se han dado a la tarea de contribuir.
Francisco Sánchez,
Laura Mesa, Claudia Yara, Andrea Morales y Ortiz Moreno, de la mano de los
estudiantes de Biología e Ingeniería Agronómica y de los mismos vecinos de la
zona, hacen visitas periódicas para identificar cuáles son las especies tanto
animales como vegetales y microrganismos,
determinantes para considerarlo zona protegida.
Martha Lucía Ortiz
Moreno, doctora en Ecología y Recursos Naturales, explicó que entre más se
estudie la zona pueden establecerse mayor número de argumentos para que la
autoridad ambiental efectivamente incorpore esa área dentro las preservadas en
el municipio.
Las visitas continuarán
realizándose cada mes con los estudiantes para recoger la suficiente
información que permitirá elaborar un documento técnico, soporte de las ONG en su lucha por defender
el humedal.
Por lo menos un año
tardarían para ver todas las especies en las diferentes épocas. El estudio
completo del humedal llevaría mucho más
tiempo, sin embargo, la idea es ir generando informes parciales que la
comunidad pueda tener como fundamento para su creación, comentó la experta.
El programa ha brindado
apoyo para la redacción de los oficios dirigidos a la constructora y a los
respectivos encargados en Cormacarena donde evidencian los daños y afectaciones
en la zona. “Extracción de agua, descarte y
uso inadecuado a la zona hídrica”, de todas esas intervenciones tenemos
las pruebas, indicó la profesora.
Los diferentes cursos del programa de Bilogía utilizarán el caso como elemento de estudio para orientar trabajos de semestre y poder concretar varios insumos que aporten a la conservación de los cuerpos hídricos. “Se espera que en el transcurso del tiempo que se realicen las visitas se generen tesis y trabajos de investigación sobre la problemática”, manifestó la doctora Ortiz Moreno.
Los diferentes cursos del programa de Bilogía utilizarán el caso como elemento de estudio para orientar trabajos de semestre y poder concretar varios insumos que aporten a la conservación de los cuerpos hídricos. “Se espera que en el transcurso del tiempo que se realicen las visitas se generen tesis y trabajos de investigación sobre la problemática”, manifestó la doctora Ortiz Moreno.
El trabajo realizado
por estudiantes y docentes ha sido bien recibido por parte de los habitantes de
La Madrid. El señor Oscar Soto, quien ha liderado las discusiones y trámites en
defensa del humedal, agradece la asistencia de los profesionales y la
participación de ellos a través de sus aportes y análisis para proteger las
zonas hídricas y sus ecosistemas.
Desde el año pasado se
inició el contacto entre el programa de Biología, el Colectivo William Barrios
y la ONG Construyendo Futuro. El acompañamiento directamente a la zona de campo
inició las primeras semanas de febrero de este año cuando con el líder comunal
Oscar Soto y Nathaly Rojas, líderes del barrio, lograron concretar la presencia
de los docentes y jóvenes en el terreno.