‘Puntilla’ era el
heredero de los imperios criminales de Daniel Barrera Barrera, alias ‘El Loco
Barrera’, quien en algún momento fue considerado como el último gran capo de
Colombia, y sus exsocios, lo que deja ver la importancia de su aprehensión en
medio de un operativo realizado de forma conjunta entre la Fiscalía Nacional
Especializada contra el Crimen Organizado y la Dijin de la Policía Nacional.
Fue tras la captura de
Daniel Rendón en 2012 que empezó a aparecer en los radares de la DEA y otras
agencias contra el crimen. En esa fecha, ‘Puntilla’ habría mandado a asesinar a
todos los lugartenientes del narcotraficante para quedarse con su organización
y sus bienes.
Se supone que fue por
esas épocas en las que entabló alianzas con otros dos ‘duros’ del narcotráfico:
alias ‘Pijarvey’ y Víctor Ramón Navarro, alias ‘Megateo’. Una vez estos fueron
abatidos, ‘Puntilla’ se habría apoderado de Norte de Santander, Meta y Vichada,
lugares concentraban su accionar criminal. En la actualidad sostenía una
sociedad con el máximo cabecilla del clan Úsuga, Dairo Antonio Úsuga.
Pachón pasó por el
cartel de Medellín, donde se inició, primero cuidando caballos, y luego como
parte de la nómina de Pablo Escobar. También por el Cartel de Cali, bajo las
órdenes de Wilber Varela alias “Jabón”. Desde antes de los años 90 ingresó al
mundo del narcotráfico pero fue creciendo en el “negocio” de la mano de ‘El
Loco Barrera’, junto a él conoció las rutas, los testaferros, los socios en los
grupos armados así como aquellos “sobornables” al interior de la fuerza
pública.
Al parecer, ‘Puntilla’
también controló el Ejército Revolucionario Popular Anticomunista de Colombia
(Erpac) después de la muerte de su líder, Pedro Oliveiro Guerrero Castillo, más
conocido como Cuchillo. Y quien fue líder del paramilitarismo en el oriente de
Colombia.
Uno de los “fuertes” de
alias ‘Puntilla’ fue haber pasado por un buen tiempo inadvertido ante las
autoridades, pues no solo se movería con tranquilidad desde Villavicencio a
Bogotá, también por el Magdalena medio, protegido por paramilitares, así mismo,
dicen, habría tendido por un tiempo visa americana, que habría usado para
visitar a sus hijos quienes viven en EE.UU.
Desde hace un poco más
de tres años las autoridades estaban tras la pista del “nuevo capo” que hoy
está bajo el control de estas, que desde ya presumen que su pena la pagaría en
EE.UU.
En este momento es
trasladado a Bogotá, donde se legalizará su captura y se le imputarán cargos
por los delitos de concierto para delinquir, homicidio y tráfico de sustancias
para el procesamiento de drogas.