Para el próximo año, el
país se prepara para concretar algunas obras que en años anteriores solo se
quedaron en promesas. Retrasos, baches y otras afectaciones han impedido que
estos proyectos culminen, pero el 2018 dará luz verde a importantes obras como
el esperado túnel de La Línea.
Pese a los retrasos,
incluido el cambio de contratista en las obras del túnel de La Línea, el
próximo año podría estar listo este proyecto de infraestructura vial que
atraviesa las montañas de la cordillera Central, y que incluye un túnel
principal de 8,6 kilómetros, 25 puentes y 20 túneles más entre Tolima y
Quindío.
Aunque en noviembre del
2017 el ministro de Transporte, Germán Cardona, dijo durante el Congreso de la
Cámara Colombiana de la Infraestructura que el gobierno del presidente Juan
Manuel Santos no alcanzará a inaugurarlo, lo más posible es que a finales del
próximo año sí se verá la luz al final del túnel, pero en diciembre, cuando
termine el contrato de instalación de los equipos electromecánicos, que recién
comenzó su ejecución este mes con la construcción de un edificio de control en
el intercambiador de Bermellón, en Cajamarca, Tolima, y que tarda
aproximadamente un año.
El director operativo
de Invías, Ernesto Correa Valderrama, dijo durante la XIV Cumbre de Alcaldes de
Ciudades Capitales, que se llevó a cabo en Armenia, que el próximo año se
comenzarán a entregar, por etapas, las obras del túnel de La Línea.
“Ayer comenzamos
nuevamente a hacer el revestimiento del túnel principal, estamos trabajando en
tres puentes y estamos lanzando túneles cortos, hay una reactivación cada vez
mayor de las obras como era previsto, hay unos temas de calidad que toca
corregir, aquí tenemos a los mejores ingenieros de túneles del país, la gente
de Ingetec, Conconcreto y la interventoría para garantizar que esta vez
salgamos adelante, lastimosamente el contrato pasado tuvo algunas dificultades
pero no nos puede seguir haciendo quedar mal”, comentó Correa.
Explicó que una obra de
este tipo tuvo que tener una revisión técnica, como estudios de suelos y
pruebas de concreto por parte del nuevo contratista en las obras adelantadas en
las fases anteriores por la Unión Temporal Segundo Centenario, esto con el fin
de garantizar la calidad del proyecto.
“Mientras se instalan
todos esos equipos (electromecánicos), que son como los acabados de un
apartamento, necesitamos hacer todas las pruebas para garantizar la seguridad
de la gente y el año entrante vamos a empezar a hacer unas entregas”,
puntualizó Correa.
Al tiempo que se
trabaja en la terminación del revestimiento del túnel principal, también se
adelanta el tratamiento de las fallas geológicas; de los 8,6 kilómetros que
tiene el túnel, 3,1 kilómetros son de falla geológica “y eso tiene un
tratamiento en ingeniería, de las fallas nos faltan un kilómetro por tratar y
el contratista ya está trabajando en las de La Gata y El Viento, estamos
próximos a las fallas La Vaca y La Soledad”, explicó el funcionario.