Un duro y sentido
reclamo hizo María Luz González presidenta de la Junta Administradora Local del
corregimiento de Servitá al alcalde Wilmar Barbosa Rozo, a la gobernadora
Marcela Amaya García y al INVIAS por las dificultades que enfrentan por cuenta
de los derrumbes y el taponamiento definitivo de la vía antigua al Llano la
cual dejó a 35 familias sin vivienda y sin comunicación con el resto del
municipio.
Dijo la líder comunal
que ante el abandono y la apatía de los gobiernos pareciera que Servitá y sus
necesidades no existieran.
Hizo un enérgico
llamado a la sociedad villavicense para que presionen una pronto solución a sus
problemas.
Pidió que ojalá no se
vaya a registrar una tragedia en la zona donde tantas veces se ha advertido.
El paso por la antigua
vía al Llano está cerrado desde el viernes en la noche cuando 8 derrumbes
acabaron con la bancada definitivamente.
El director regional
del INVÍAS no sabe cuándo ni cómo se dará nuevamente paso. Los vehículos de
carga pesada y las motocicletas están pasando por los túneles nuevos de
Bijagual y Buenavista dijo Fernando Castillo jefe de operaciones de COVIANDES.