La ministra Yaneth Giha
presentó este miércoles el Decreto 1421 de 2017, que reglamenta la prestación
del servicio educativo a este sector de la población, para garantizar una
educación de calidad y en condiciones de equidad.
El Decreto plantea una
implementación progresiva que permita al Sector Educativo avanzar, en cinco
años, en el cumplimiento de sus disposiciones.
El Gobierno nacional
sigue desarrollando y articulando iniciativas para mejorar la calidad y la
cobertura del servicio educativo para todos los colombianos.
Este miércoles, Yaneth
Giha Tovar, ministra de Educación, presentó el Decreto 1421 del 29 de agosto de
2017, que tiene como objetivo fundamental reglamentar la prestación del
servicio educativo para la población con discapacidad desde el acceso, la
permanencia y la calidad, para que los niños puedan transitar por la educación
desde preescolar hasta la superior o educación para el trabajo y el desarrollo
humano.
Giha aseguró que a las
iniciativas que desde hace años se trabajan desde el Gobierno nacional en
materia de inclusión educativa se suma este articulado que, enfatizó, es el
compromiso que el Gobierno en general y el Sector Educativo establecen para
eliminar gradualmente las barreras existentes con el fin de que las personas
con discapacidad ingresen a la educación y se promueva su desarrollo,
aprendizaje y participación en condiciones de equidad con los demás
estudiantes.
“Este Decreto nos marca
un camino de transformación en el sistema educativo, para transitar hacia un
modelo de inclusión, donde los estudiantes con discapacidad tengan las mismas
garantías de educación que el resto de los estudiantes”, dijo Giha al presentar
el Decreto, en desarrollo del Consejo Nacional de Discapacidad –del Plan
Presidencial para la Inclusión de Personas con Discapacidad–, que se llevó a
cabo este miércoles en Maloka, en Bogotá.
El Decreto, explicó la
Ministra de Educación, contempla cinco aspectos clave para mejorar el servicio
de educación a las personas con discapacidad y sitúa a Colombia en la línea de
los países que más acciones han desarrollado para atender a esta población,
como condiciones para el acceso sin barreras, la permanencia y procesos
educativos de calidad para la continuidad educativa; una oferta educativa
pertinente, y un plan progresivo de implementación.
En este sentido, la
Ministra informó que el Decreto establece un plazo de cinco años a las
Entidades Territoriales e instituciones educativas oficiales y privadas para
dar cumplimiento a sus disposiciones y que van en la línea de hacer a Colombia
el país mejor educado en 2025.
“Una de las apuestas
más importantes es que los estudiantes con discapacidad puedan formarse en el
mismo salón de clases que el resto de sus compañeros –manifestó la Ministra–,
para ello se crearán los Planes Individuales de Ajustes Razonables (PIAR), es
decir, un plan para cada estudiante que contiene todos los apoyos que necesita
para aprender en condiciones de equidad”.
Este nuevo enfoque,
subrayó la Ministra, se basará en la capacidad de los profesores para
garantizar que todos los estudiantes aprendan y, en algunos casos, en docentes
de apoyo, que asesorarán y acompañarán a los maestros en el aula, durante el
proceso de construcción e implementación de los planes individuales.
Los docentes de apoyo,
que tienen experiencia en la atención de las personas con discapacidad, serán
los encargados, además, de hacer visitas de seguimiento a la implementación de las
prácticas de enseñanza y articulación de los métodos pedagógicos para todos los
niños y jóvenes.
El Decreto 1421
establece que todos los estudiantes con discapacidad, sin discriminación
alguna, tienen el derecho de acceder a la oferta institucional existente,
cercana a su lugar de residencia, con estudiantes de su edad y a recibir los
apoyos y ajustes razonables que se requieren para que tengan un proceso
educativo exitoso.
Además, que la oferta
para la población con discapacidad auditiva debe ser bilingüe y bicultural,
específicamente en la Lengua de Señas Colombiana-Español como segunda lengua,
para lo cual los establecimientos educativos regulares deberán contar, entre
otros aspectos, con aulas paralelas, docentes bilingües y otros apoyos
tecnológicos, didácticos y lingüísticos requeridos.
En el proceso de ajuste
del Sector al Decreto, se contemplará un modelo educativo flexible en centros
hospitalarios y hogares para los estudiantes que por sus condiciones de salud y
ubicación geográfica así lo requieran. Esto se hará coordinadamente con el
Sistema de Salud.
“El principal desafío
que tenemos, entre todos, es que el sistema educativo se adapte al estudiante
con discapacidad y no el estudiante al sistema. Es un Decreto muy importante
pues adicionalmente abre las puertas a una educación en la que todos los estudiantes
crecen en un entorno de respeto y valoran la diversidad y es la oportunidad
para cerrar las brechas de desigualdad, garantizando que todos nuestros niños y
jóvenes accedan, en idénticas condiciones, a educación de calidad”, dijo la
ministra Giha.
El Ministerio de
Educación realizará acompañamiento técnico a las Secretarías de Educación, a
partir de septiembre próximo, para apoyar la construcción de los planes de
implementación en las instituciones educativas. Además, organizará procesos de
formación docente para cualificar las prácticas de los maestros con el fin de
que atiendan adecuadamente a los estudiantes con discapacidad.