Luego de establecer la presunta
participación del coronel (r) Jorge Eliécer Plazas Acevedo, en la masacre de
Mapiripán (Meta), un fiscal adscrito a la Dirección Nacional Especializada de
Derechos Humanos y DIH resolvió la situación jurídica en su contra y le dictó
medida de aseguramiento sin beneficio de excarcelación por los delitos de
homicidio agravado, secuestro extorsivo agravado, terrorismo y concierto para
delinquir.
Según lo establecido, el 12 de julio de
1997 un grupo de aproximadamente 30 hombres, integrantes de las Autodefensas
Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), lideradas por Carlos Castaño Gil, se
desplazaron vía aérea desde el aeropuerto del municipio de Necoclí y Los Cedros
(Antioquia), arribando al terminal aéreo de San José del Guaviare (Guaviare),
controlado militarmente por unidades del Batallón de Infantería del Ejército
Joaquín París.
Para la época, Plazas Acevedo se
desempeñaba como oficial del B2 de la Brigada XVII del Ejército, de cuya
jurisdicción salieron las aeronaves.
En la masacre varias personas fueron
torturadas y asesinadas con tiros de gracia o degolladas. Los cuerpos de
algunas víctimas fueron incinerados, otros desmembrados y arrojados a las aguas
del Río Guaviare.