Un nuevo capítulo de la
telenovela, que lleva más de ocho años de estar siendo transmitida a todas las personas
residentes en la ciudad de Acacías, en directo y deferido, de una lamentable historia
donde los recursos y el honor de los acacireños, han quedado en entredicho, por
no haber podido durante este tiempo, la justicia colombiana dar un veredicto
ajustado a las diferentes situaciones, que recoja, el sentir y aplicación de una verdadera justicia, sin dilaciones, y
enfocada a salvaguardar los intereses de más de cien mil ciudadanos que
habitamos en la ciudad de Acacias, quienes hemos visto con desdén los
diferentes conceptos de una justicia, donde una fiscal, tiene que tutelar a un
juez, ahora la fiscalía entutela un tribunal, entonces a quien atenernos.
Si, entre las
autoridades judiciales no encuentran consenso a la luz de las normas, para dirimir jurídicamente;
ello nos indica es que nuestra justicia en verdad está en total decadencia. A
vuelo de pájaro puedo notar que ahora en enfrascamiento es entre los mismos
jueces de la república, mientras los indiciados, siguen su rumbo campante,
mirando de soslayo como la gente de bien solo se les ve la perplejidad, y con
estupor miramos como el tiempo hace su inexorable recorrido, y cada día mas se
acerca la fecha para que estos triste capítulos, supuestamente llenos de corrupción, quejas , tutelas demandas contrademandas,
cambio de abogados, cambio de fechas , enfermedades, viajes programados, como
si la justicia, fuere planto de tercer a cuarta de categoría.
Se exponen en capítulos
con un buen reparto, pero lo único que está claro es que los términos para dar
por terminado la historia de la telenovela está a punto de llegar, a su fin prescripción. y en esta obra, como van
las cosas, solo ganaran los malos de la obra.
Sería conveniente
buscar el título a la misma, “Relatos de un Náufrago”, por los acacireños.
Crónica de un tumbe
anunciado…