D Notillano.
San Martín. El coronel del ejército, Jorge Eliécer Plazas
Acevedo, vinculado a la muerte del periodista, Jaime Garzón y condenado por
secuestro y asesinato, se refugió en San Martín de los Llanos y terminó haciendo parte de la banda criminal
del abatido jefe paramilitar, Pedro Oliverio Guerrero Castillo, alias
‘Cuchillo’.
La Fiscalía y la
Policía lo capturaron cuando caminaba tranquilamente frente al parque. Un cerco
de seguridad de 20 hombres le cerró el paso para hacer efectiva la orden
judicial por homicidio agravado, concierto para delinquir y secuestro.
Las autoridades
aseguran que Plazas, como oficial fue la mano derecha del general Rito Alejo
del Río, terminó siendo una especie de ideólogo del ‘Ejército Revolucionario
Popular Anticomunista de Colombia’ (Erpac), banda criminal surgida tras la
desmovilización del Bloque Centauros de las Autodefensas en el Meta y Guaviare,
brazo armado del narcotraficante Daniel el ‘Loco’ Barrera.
Su rastro se perdió en
julio del 2003, cuando se fugó de una unidad militar en la que cumplía una pena
de 40 años por el secuestro y homicidio del industrial Benjamín Khoudari.
Plazas, conoce la
verdad sobre los nexos de altos miembros de la Fuerza Pública con los
paramilitares de Urabá y los Llanos. Además, tendría información sobre más
oficiales vinculados a la masacre de Mapiripán.
El vicefiscal de la
nación, Jorge Fernando Perdomo, dijo que el oficial tendrá que empezar a
responder por el apoyo a los paramilitares que asesinaron al periodista Jaime
Garzón, en agosto de 1999.