Acacías Meta una ciudad de tradición conservadora, no solo de color,
sino lo más importante de principios, como los enmarcados, enseñados, señalados
y practicados por nuestros antecesores, quienes con lujo de detalles enseñaron y preservaron todas estas muy buenas enseñanzas, con el único fin de que se respetaran y se les rindiera
honores al partido, precisamente practicando o mejor haciendo uso de todas
esas sanas cualidades, principio de una muy buena
urbanidad, como son los preceptos e ideales del partido.
Como una simple torre de babel, se construyó un perverso proyecto
político, que más que proyecto, no fue otro que un sucio remedo,
tramado por sujetos ajenos totalmente a los principios filosóficos del Glorioso
Partido Conservador, el mismo que condujo por mas de casi
9 décadas a la tierra por Dios bendecida como lo es nuestra Acacias, por los
senderos del progreso, de la producción, de la educación del respeto por el ser
humano, y por todos los valores,
que hasta esta fecha estamos a un par de meses de estar celebrando nuestro
centenario como un muy buen balance.
Tristemente con un partido Conservador hecho añicos, sin identidad,
plagado de corrupción, con candidatos prestados, perdiendo
los escaños en el honorable concejo municipal para la próxima
legislatura, solo se conserva una curul que al igual es prestada, puesto que
son los seguidos del Mira, quienes votaron por su candidata, así que de
conservatismo nada que ver.
Ahora
Gilberdaiz, pregunta ¿en donde se pueden hallar los comerciantes que rifaron, vendieron, entregaron como Judas al partido Conservador Colombiano en la ciudad
de Acacias, al mejor postor? para que le respondan así sea a la
historia del municipio y si hay un poco de carácter o vergüenza, renuncien
públicamente al menos a decir o figurar
como militantes del partido conservador
y dejen el vulgar mercadeo con una ideología una filosofía unos principios de
familia, que a la vez son columna vertebral de la sociedad, valores
innegables del partido conservador.