Los detenidos estarían facilitando el
ingreso de sustancias y otros elementos que comercializa una organización
criminal.
Los guardianes del
Inpec fueron judicializados como presuntos responsables de facilitar el actuar
ilícito de una banda que se dedicaba a la comercialización de sustancias
estupefacientes al interior del centro penitenciario de La Guafilla, en Yopal
(Casanare).
Según el director
Seccional de Fiscalías en Casanare, la investigación comenzó en septiembre de
2018 y fue adelantada por el Gaula Militar y la Fiscalía, en coordinación con
la dirección del Inpec.
Con los resultados
obtenidos, se consiguió develar la existencia de una organización criminal que
se encargaba del ingreso de estupefacientes, teléfonos celulares y otros
elementos tecnológicos, que no se permiten dentro del centro penitenciario.
En total, fueron
capturadas nueve personas, a las cuales se les imputó el delito de concierto
para delinquir, con el fin de comercializar estupefacientes, mientras que a dos
funcionarios del Inpec se les imputó el delito de cohecho propio.
A los dos guardianes
del Inpec se les impuso medida de aseguramiento con detención preventiva, que
deberán cumplir en la cárcel La Picota de Bogotá; mientras que a otras tres
personas se les impone medida de detención preventiva en la cárcel de Sogamoso.
La Fiscalía apeló la
decisión del juez de dejar en libertad a otros dos capturados, por considerar
que está en desacuerdo con la determinación del togado de no imponerles medida
de aseguramiento.
Según indicó la
Fiscalía, el modus operandi de la banda conocida como 'Entrerrejas', en la que
participaban varias mujeres, consistía en que éstas eran las encargadas de
alistar el estupefaciente, servían además de correo humano para llevarlo
camuflado en sus partes íntimas y de pagar a los guardianes el dinero para
facilitar la acción delictiva.