Dicen que la familia solo puede construirse por un hombre y una mujer.
Un grupo de ciudadanos
cristianos se plantaron frente a la Corte Constitucional para pedir que no
modifique el concepto de la familia como se conoce de manera tradicional:
conformada por un hombre y una mujer.
Carlos Eduardo Acosta,
representante a la Cámara por el partido Colombia Justa Libres, dijo que el
inconformismo es por una demanda que pide ampliar el concepto de familia
incluyendo a las personas del mismo sexo.
“Estamos acompañando a
la ciudadanía que se manifiesta libremente contra la admisión de una demanda
que pretende cambiar el artículo donde está claramente explicito que la familia
está conformada por un hombre, una mujer y sus hijos si los tienen”, dijo.
Se trata de la demanda
contra uno de los artículos de la ley 1361 de 2009, por el cual se crea la ley
de protección integral a la familia.
“Familia: Es el núcleo
fundamental de la sociedad. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos,
por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la
voluntad responsable de conformarla”, señala el artículo 2.
Los demandantes señalan
que dicha norma iría en contra-vía de los derechos fundamentales de las parejas
del mismo sexo, “excluye a las personas del mismo sexo del concepto de
familia”.
“Se busca que el concepto de familia incluya a
las parejas del mismo sexo (…) las obligaciones que tiene el Estado al ser
parte de los tratados internacionales que protegen los derechos fundamentales
de las comunidades Lgtbi”, señala la demanda.
El representante señaló
que al unirse las parejas del mismo sexo se crea una sociedad, pero según él,
“no se puede confundir el concepto institucional de familia con la decisión que
tengan las personas se ejercer su sexualidad como quieran”.
Juan David Peña, uno de
los ciudadanos que apoya la protesta, señaló que “para nosotros los niños
necesitan crecer con un rol masculino y femenino y esa es la forma natural en
la que deben crecer”.
La demanda fue admitida
por la Corte y se encuentra en el despacho del magistrado Alberto Rojas Ríos.