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Con la reforma tributaria aprobada
para el período 2015 – 2018, se estipuló que a partir del 1 de enero se
implementara el impuesto a la riqueza y se mantuvieran vigentes los recaudos
por las transacciones financieras y el cuatro por mil.
Justamente el impuesto
a la riqueza o el impuesto contra la pobreza como lo llamó el presidente Juan
Manuel Santos, fue uno de los más discutidos hasta el último momento de debate
en el Congreso de la República.
Cabe destacar que el
impuesto a la riqueza para las persona jurídicas habrá un gravamen del 1.15 por
ciento durante el 2015 y 1 por ciento en el 2016.
La iniciativa del
Gobierno planteó que en el 2017, el impuesto bajará al 0.4 % y posteriormente
desaparecerá en el 2018.
Sin embargo, quedó
establecido que en el caso de las personas naturales cuyo capital supera los
mil millones de pesos, tendrán que pagar una tributación del 1.5 por ciento,
durante los cuatro años de aplicación de la Reforma Tributaria.
De acuerdo con las
cifras entregadas por el Gobierno, se estimó que esperan un recaudo de 6
billones de pesos con el impuesto contra la pobreza, que según el Jefe del
Estado, serán invertidos en los proyectos sociales del Gobierno Nacional.
Los cálculos entregados
por el Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, indican que serán 14 billones de
pesos los que el Gobierno Nacional espera recaudar al término del 2018 con la
aplicación de esta Reforma Tributaria.