La Fiscalía Séptima de la Unidad Nacional contra el
Terrorismo imputó el delito de fabricación, tráfico y porte de armas y
municiones de uso privativo de las Fuerzas Armadas a dos oficiales (uno
retirado) y dos suboficiales del Ejército Nacional, así como a una particular,
y solicitó les fuera impuesta medida de aseguramiento por su presunta
participación en la entrega de material bélico a las Farc.
La delegada fiscal aseguró que los uniformados sacaban el
armamento de almacenes de las bases militares y lo camuflaban en sus vehículos para entregarlo luego a los
enlaces del grupo guerrillero.
La primera captura se hizo efectiva en contra de un cabo
viceprimero en la Cuarta Brigada de Medellín. Posteriormente, fueron detenidos
en Ibagué un sargento primero y un teniente activo, quienes fueron trasladados
a Bogotá, donde se les realizó la audiencia de legalización de captura ante el
Juez Séptimo Penal, con funciones de control de garantías.
La investigación se deriva del hallazgo de granadas de
fragmentación, entre otro material bélico, en mayo de este año en la vía que de
Garzón (Huila) conduce a Florencia (Caquetá).
De acuerdo con lo establecido por los investigadores,
aproximadamente 200 granadas estaban destinadas a estructuras insurgentes como:
el Frente Décimo, y los Bloques Oriental y Sur. El armamento fue sustraído,
aparentemente, de las bases militares de Tolemaida, en Melgar (Tolima), y de
Larandia, en zona rural de Florencia.
Tres de los imputados fueron recluidos en la cárcel de La
Picota, al sur de Bogotá, a otro el juez le concedió la detención domiciliaria
y una quinta persona, una mujer, también quedará detenida en su domicilio por
su condición de madre cabeza de familia.