El sendero o vía peatonal ordenadO construir mediante fallo
judicial a la administración municipal en esa entonces a cargo de Jesús Amador Pérez,
a la cual se dio inicio pero que no tuvo final, como es el sendero que desde la institución Educativa Juan Rozo,
pasando por el barrio Villa teresa y con un final incierto; es hoy motivo de frustración
nuevamente, debido a que la administración
actual tiene la obligación de cumplir con el fallo judicial, es decir, Cumplir con
la construcción de la obra, lo cual ha intentado hacerlo adjudicando el contrato
con unos profesionales de la ciudad de Acacias, contrato que no socializaron con el
común de la comunidad y por el contrario en forma agresiva, rompieron andenes,
arrasaron arboles ornamentales y por ultimo dejaron que las entradas a las
casas de la calle 18 quedaron en un nivel mas bajo que el de los andenes que
pretendieron instalar, motivo o razón suficiente para que la comunidad se opusiera
a dejar que este adefesio siguiera su curso a despensas de los daños y perjuicios
de toda una comunidad y a beneficio tan solo de los interesados en adelantar la
obra.
El ingeniero Carlos Hernández, secretario de infraestructura fue
informado del caso: Muy puntual llego al sitio pero hasta ahora no se ha dado respuesta
alguna mientras tanto la gentes del sector están a despensas de grades barréales
cuando llueven o de una copiosa nube de polvareda cuando el sol calienta como
sucede en estos días Desde hace por lo menos
15 dias nadie da cara al sector. Este Medio de comunicación por ientermedio de
su director JOSE GILBERTO DIAZ PARDO, se comunicò por via teléfono con el Señor
Alcalde del municipio de Acacìoas Arsenio Vargas Alvarez, quien muy cuidadosamente
atendió la llamada y se comprometió para la próxima semana estar en el sector con
las personas responsables de los hechos junto con la presidencia de la junta de
Acciòn comunal del Sector. Ojala la obra pueda ser por fin saludable, por una DECISIÓN CORRECTA, sin perjuicio de la comunidad
que en nada se beneficia de la misma.
Aspecto deplorable de la obra. Foto El Conuco |