Por José Gilberto Díaz Pardo
Cel. 3123651651, E-mail. gilbertodiaz1959@hotmail.com
Es innegable que la mayoría de nosotros los colombianos somos
nobles, sinceros y sumisos, me atrevería
a pensar que estas cualidades nos están llevando al borde del abismo.
José Gilberto ]Diaz Pardo |
En la década de los 90 cuando la situación
de orden público y seguridad del país era tan difícil, se intervino la antiquísima
y obsoleta constitución del 86 creando
una nueva carta magna para la navegación
tanto en lo jurídico, administrativo y
otras facetas, por así decirlo que se desprenden de la misma. Aparecieron herramienta tan importante para la comunidad como
la acción de tutela, se le trató de dar un orden a la administración de
justicia, políticamente el país avanzo al pasar de estar sujeto a las condiciones
y caprichos de unos partidos políticos anacrónicos y paquidérmicos a unas fuerzas deliberantes democráticas
donde las nuevas generaciones trataron por así decirlo de integrarse a la
actividad política de un país que requiere de la presencia y del apoyo de los
mismos. Desafortunadamente la avidez el interés inusitado malsano corroído por el óxido de la corrupción, de
los politiqueros de siempre, paulatinamente fue invadiendo y contaminando esa
carta magna que a pesar de no ser la ideal era mejor.
Con el auspicio de los mandatarios la
clase politiquera que ha manejado nuestro estado han hecho de la constitución una
sucia colcha de retazos; reformas vienen reformas van pero nada en beneficio de
los residentes de este paraíso llamado Colombia, los resultados positivos se ven
reflejados en las arcas de la clase politiquera en unas pocas familias y en el
sistema financiero que hoy por hoy son los únicos que pueden sentirse seguros
en nuestra Colombia, si así lo prefieren, pues de todos es conocido que ellos
tienen grandes inversiones de pesos colombianos convertidos en dólares y euros en
el extranjero.
Utilizando un término taurino, se ejecutó el último
tercio con una vergonzosa y funesta reforma a la justicia,
donde quedó reflejado el sucio interés personal de los legisladores
quienes en forma soterrada convirtieron lo poco que quedaba de la constitución del 91 en una triste cloaca llena de vericuetos con senderos oscuros con
trampas a la vera de cada uno de los mismos… Qué vergüenza…. Ahora resulta que
los mismos politiqueros pertenecientes a partidos tradicionales entre otros se
rasgan las vestiduras y salen a crear movimientos como referendos entre otros
supuestamente para salvar la constitución
y a Colombia de caer al abismo donde hace rato en forma continua estamos
llegando; por ejemplo el partido de gobierno con su famosa unidad nacional junto con sus secuaces los
mismos que no les importo raponear los dineros productos
de las tazas de compensación a que tienen derechos las zonas productoras de
hidrocarburos por daños ocasionados en el medio ambiente; ahora pretenden revindicasen
con lo realizado desde el congreso en contra de la constitución y en favor de
ellos, allí participo la gran mayoría del congreso de Colombia; hoy quieren aparecer
como salvadores de Colombia haciendo pronunciamiento a la maquiavélica reforma
de justicia la cual ellos apoyaron y defendieron en todo momento.
Da tristeza que movimientos
alternativos en los cuales se tenía una esperanza hayan sucumbido al interior de
ese monstro llamado corrupción casos transmilenio avenida 26, los Moreno, los
tapias, entre otros muchos bajo la luz tutelar de los Nule, hacen parte de una historia no muy clara. Ellos también quieren enarbolar la bandera de la construcción de
una nueva reforma constitucional a la justicia ¿acaso se les podrá creer? ¿Sera
que la historia de la toma del palacio
de justicia de la embajada extranjera y tantos crimines cometidos en contra
de víctimas inocentes pueden servir como
carta de presentación para proponer y hablar de moral y justicia?.
Desde este modesto escrito quisiera cursarle
una invitación a más del 90% de colombianos y colombianas que queremos nuestro país
deseamos que se pronuncien atreves de
las redes sociales como se viene haciendo pero forma masiva, para poder
conformar un grupo de valientes luchadores compuestos por hombres y mujeres con
principios claros para derrotar está sucia política que se ejerce en el interior de un estado que
cada dia se ve más amenazado, pero lo peor de todo bajo nuestra mirada de soslayo complaciente, como si el tema no fuera
con nosotros. Armémonos de ideas renovadoras donde
los beneficiarios no sean unos pocos corruptos que legislan a favor de si mismo
sino por lo contrario que los beneficios
y el peso de la justicia sea para todos,
solo así obtendremos paz y bienestar para todos los colombianos y colombianas
recordemos que nuestra amada patria nos pertenece y tenemos que defenderla
todos y todas