El Instituto Nacional Penitenciario y no el juez primero de
ejecución de penas de Fusagasugá era el que debía ordenar el traslado de la
empresaria del chance a un centro médico en Barranquilla, determinó el Tribunal
Superior de Cundinamarca.
El Inpec, potentado a hacer esos traslados según sentencia de
la Corte Constitucional, deberá examinar de nuevo si ‘La Gata’ debe permanecer
en la clínica donde permanece recluida en Barranquilla o debe regresar a un
centro penitenciario.