El
padre José Alejo Gelves Vega, quien se desempeñaba como rector del colegio
Marco Fildel Suárez y prestaba su servicio pastoral en la parroquia San Antonio
de Padua en el municipio de El Zulia, es señalado de abusar sexualmente de un
menor de 16 años de edad.
El
obispo de Cúcuta, monseñor Víctor Manuel Ochoa, informó que “la Fiscalía
General de la Nación ordenó la detención del sacerdote José Alejo Gelves al
considerarlo responsable de abuso sexual de un menor de edad”.
Así
mismo, el jerarca de la Iglesia Católica sostuvo que se inició un proceso
canónico con el sacerdote implicado, quien desde el momento de la acusación
queda inmediatamente suspendido de su ejercicio ministerial, respetando el
debido proceso, tanto ante la justicia civil como ante la justicia canónica.
Monseñor
Ochoa dijo a RCN Radio que la iglesia ofrece y desea garantizar a la víctima un
acompañamiento espiritual y psicológic,o ante la gravedad de lo sucedido.
Según
las autoridades, el abuso sexual se registró el pasado sábado 27 de julio. Tan
pronto se conoció la denuncia por parte del menor y de su familia, se dio
inicio al proceso de investigación.
El
abuso del menor no procede del ámbito parroquial, ya que se cometió en el
ámbito escolar, teniendo en cuenta que el sacerdote es el rector del
establecimiento educativo.
El
padre José Alejo Gelves, de 55 años de edad y oriundo de Arboledas, inició la
docencia en el municipio de Villa del Rosario, en el año de 1995.
En
2000 fue rector del colegio Nuestra Señora de las Mercedes en Sardinata. Para
2010 era rector del establecimiento educativo Fe y Alegría, en el municipio de
Los Patios. En el 2015 regresa como rector al mismo colegio en Sardinata y
desde inicios del año 2018 se desempeñaba como rector del colegio Marco Fidel
Suárez, en El Zulia.
“Como
obispo de Cúcuta he enfrentado algunos casos similares de abuso sexual, pero
tan pronto se tiene la certeza moral de lo sucedido se procede a retirarlos
como sacerdotes y enviamos información a la Santa Sede y a la autoridades
competentes”, dijo el obispo de Cúcuta monseñor.
“Es
un grave daño, un momento de mucho dolor, de gran tristeza. Queremos dar la
prioridad a nuestros niños respetando sus derechos y de acompañamiento; esta
mala acción daña la imagen de la iglesia católica”, dijo el Obispo de Cúcuta.
"Esperamos
que no se presente nunca más otro caso similar que atenta contra la dignidad de
los menores y de sus mismas familias. Estamos seguros del compromiso de la
totalidad de nuestros sacerdotes", apuntó.