“En 1905 por decreto
No. 177 de febrero 18 se llamó Intendencia Nacional del Meta, con Villavicencio
como capital. La ley 118 del 16 de diciembre de 1959 erigió al Meta como
departamento, constituyéndose en el decimoséptimo de Colombia a partir de 1 de
julio de 1960.”
Por José Gilberto Díaz Pardo.
Hoy primero de Julio de
2.019, la tierra sin arrugas como lo es nuestro querido departamento del meta esta de cumpleaños como departamento,
son 59 años de lucha tesón, donde nuestro territorio ha sido morada para muchos
inmigrantes que llegaron desde antes de esa fecha buscando un mejor porvenir y
a juro que lo han conseguido.
Sin embargo la realidad
para los coterráneos, las cosas no han sido tan fáciles, un departamento con historia de violencia, varios
de sus municipios fueron entregados a grupos armados, que hicieron de su estado
derecho trizas, como bien se dice por ahí, con las mal llamadas zonas de despeje,
que no dejaron sin no malas experiencias y tristezas para para muchas familias,
que perdieron sus hermanos, hijos, y demás, como consecuencia del secuestro el
vil asesinato de muchos de ellos, desapariciones, que aun después de varias décadas,
no se tiene un dato oficial de cuantos fueron o cuantos hacen falta, despojos
de tierras, entre otras acciones de las cuales los nativos quisiéramos olvidar,
pero las heridas son tan profundas que pasarán muchos años y tal vez siglos
para que ello quede en los anaqueles de las historia, como eso, una mala historia.
Amen, desde luego de la
aparición de grupos de autodefensas, que tomaron como caldo de cultivo, las
acciones mencionadas arriba, como clara justificación, para tomar la justicia por
su cuenta, agravando más la situación por cierto calimosa.
Había que poseer fuentes de financiación para poder
mantener los costos logísticos, desde luego necesidad de ambos bandos, mal
llamados de izquierda y de derecha, porque en el fondo no encarnan, para este
caso, con sus acciones el contenido filosófico,
que las dos palabrejas encarnan, solo su interés es económico, por ello
tomaron, además de secuestro la extorsión, entre otros; narcotráfico como la principal fuente de financiación
de cada uno de los aparatos militares,
de los bandos supuestamente en conflicto,permedando de esta manera a muchos gremios,
campesinos entre otros que vieron en ese flagelo la tabla de salvación para su agobiantes
necesidades, que vivían en medio del fuego cruzado, y desde luego no se
desaprovecho la malsana oportunidad.
De esta manera, hay más
efectivo circulante, los predios como consecuencia de una economía subterránea adquieren
valores insospechados, por ende ya no hay más cultivos tradicionales, arroz,
sorgo, soya, yuca plátano entre otros, pues los predios son utilizados, unos
para cultivos ilícitos, otros sendas obras de construcción por cierto ostentosas,
es decir, se masificó el narcotráfico, tanto en lo rural, como en lo urbano.
Los pocos espacios que quedan
libres de estas acciones y por obvias razones
son utilizadas por Ecopetrol, para la exploración y explotación de
hidrocarburos, otro mal para nuestra
región; más inmigrantes, más prostitución, más pobreza, mas carestía, fuentes
de empleo, la mayoría para foráneos, debido a que ellos tienen la vocación de
petroleros, como se dice coloquialmente la tienen clara, mientras que los
nativos, ni sabíamos de guerrilla ni de autodefensas, mucho menos de narcotraficantes,
de trabajadores de la industria de las palmeras, mucho menos de petroleros, ha
tocado improvisar en cada uno de los renglones, para no desaparecer.
Con el ojo tutelar de
la vía Bogotá Villavicencio, que no nos desampara ni por un minuto, siempre
hemos estados amenazados permanentemente las veinticuatro horas, colocando tal
vez para la historia cada día más y más muertos, esperando que una mano piadosa
se conduela de nosotros o de nuestra situación.
Paródicamente este mal
no es de ahora, la vía Bogotá Villavicencio, siempre ha sido un problema para los
llaneros y demás, ojala le pudiéramos preguntar a Nicolás de Federman entre
otros, como eran los caminos desde San Juan de Arama a Santafé de Bogotá. La
verdad no creo que haya cambiado mucho
con excepción, que desde hace varios años los gobiernos y gremios han explotado
el recurso de erario público, supuestamente construyendo autopista, que solo
son una vergüenza, y que para esta época el precio más alto que hay que pagar
es con nuestras propias vidas.
Soy muy feliz de ser metense y que viva mi departamento del
Meta, Feliz cumpleaños.
Vendrán tiempos
mejores.
Buen Día