La
juez Catalina Piedrahita, quien ha sido coordinadora del Centro de Servicios
Judiciales de los Juzgados Penales para Adolescentes, explicó que se le
impondrá una sanción de tipo pedagógico y que pagaría como máximo ocho años,
según lo contemplado en el Código de Infancia y Adolescencia.
“Dentro
del Carlos Lleras hay un bloque especial para adolescentes que cumplen mayoría
de edad y terminan de pagar en ese lugar. Los profesionales deben trabajar
fuertemente, le compete más a un psicólogo determinar si hay la posibilidad o
no de que se rehabilite (…) hay que atender la familia y la sociedad porque de
ahí surgen esos chicos”, aseguró Piedrahita.
En
cuanto a los demás delitos que habría cometido el joven, la juez indicó que no
están registrados en el Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes y
que la Fiscalía es la encargada de adelantar las respectivas investigaciones.
Aunque
se desconocen los móviles detrás de la acción criminal del menor, se presume
que fue reclutado por bandas criminales del sector.
“Yo
creo que goza de las dos calidades: es víctima de quien lo instrumentalizó y es
victimario de las dos personas que fallecieron; no creo que un chico de 14 años
desee acudir a una licorera y acabar con la vida de dos personas, el modus
operandi es que las bandas los instrumentalizan”, concluyó la juez.