El
procurador Fernando Carrillo insistió en la necesidad de que se haga efectiva
la liquidación de la EPS Medimás, tras conocer el último informe de revisión
fiscal de la Contraloría General, que daría cuenta de que la entidad prestadora
de salud tendría grandes pérdidas económicas que ascienden a los 108 mil millones
de pesos.
Ese
mismo informe señala que los pasivos de la entidad ascienden a 2.8 billones de
pesos, mientras que el patrimonio negativo es de -$1,02 billones de pesos.
En
ese sentido, Carrillo solicitó al superintendente Nacional de Salud, Fabio
Aristizábal, adelantar una intervención forzosa administrativa para liquidar a
Medimás y con ello garantizar los derechos a la salud y la vida de los
usuarios.
“Los
hallazgos descritos confirman que la medida de vigilancia especial y demás
actuaciones desarrolladas por la Superintendencia Nacional de Salud desde 2017,
han resultado inocuas, y por el contrario, a la fecha se evidencian agravadas
las condiciones de incumplimiento de la Capacidad Científica; la Capacidad
Técnico Administrativa y la Capacidad Tecnológica necesarias para que Medimás
E.P.S. S.A.S pueda operar como Entidad Promotora de Salud”, señaló Carrillo a
la Supersalud.
El
Procurador también cuestionó que, al parecer, las acciones de la Supersalud,
encaminadas a evitar la pérdida de recursos de la EPS, no se hayan conocido por
la opinión pública y recordó las alertas por “la práctica irregular de entrega
de anticipos a las IPS Procardio y Miocardio, accionistas de Prestnewco S.A.S.,
propietaria de Medimás”.
Carrillo
dice que dichas IPS han recibido recursos con los cuales “se pagaron
porcentajes de las cuotas derivadas de la adquisición de acciones de Cafesalud
S.A. y Esimed S.A., así como a otras IPS que reciben pagos del sistema de salud
y no prestan los servicios”.
"Medimás
ha legalizado anticipos por $98.460 millones de pesos, al parecer, sin efectuar
auditoría de cuentas, conducta reprochada por este organismo de control y
también puesta en conocimiento de la Superintendencia Nacional de Salud, que
representa un grave riesgo de desvío de los recursos públicos de la seguridad
social en salud administrados por la EPS”, advierte la comunicación enviada al
superintendente Aristizábal.
Según
la Procuraduría, las irregularidades registradas en el informe de la
Contraloría también incluyen la inexistencia de una red de prestación de
servicios, el pago de facturas sin auditoria médica, cerca de 4.024 incidentes
de desacato a decisiones judiciales y una deuda a Saludcoop, por más de 200 mil
millones de pesos por la compra de Cafesalud y Esimed.