El año pasado las
labores de reparación superaron los $100 mil millones, debido a los ataques
terroristas, la mayoría cometidos por el ELN.
Desde su entrada en
operación hace 33 años, el oleoducto Caño Limón Coveñas ha sufrido cerca de
1.500 atentados y se han derramado cerca de cuatro millones de barriles de
petróleo.
En el oleoducto se
reportaron el año pasado 89 atentados, lo que provocó el derrame de 21.029
barriles.
En 2018 el costo de las
reparaciones de los oleoductos por cuenta de los atentados ascendió a más $100
mil millones, (60 % corresponden a Caño Limón).
Según cifras entregadas
por Ecopetrol, en los últimos cinco años se han contabilizado más de
trescientos atentados:
2015: 82.
2016: 51.
2017: 65.
2018: 105.
2019: van 21.
Los departamentos donde
más atentados se registran es en Norte de Santander, Arauca, Nariño y Putumayo.
En el Catatumbo, las
voladuras ponen en riesgo ecosistemas donde habitan más de 20 especies de
mamíferos, 30 de peces, 15 de réptiles y 20 de anfibios.