De El Heraldo.
El presunto autor del
atentado a la Estación de Policía del barrio San José fue trasladado en
helicóptero de la Policía desde Barranquilla a la capital del Cesar.
En medio de estrictas
medidas de seguridad fue trasladado ayer de Barranquilla a la penitenciaría de
Valledupar, Cristian Bellón Galindo, presunto autor del atentado a la estación
de Policía en el barrio San José de la capital del Atlántico que dejó cinco
uniformados muertos y 48 heridos.
A bordo de un
helicóptero de la Policía salió de Barranquilla con destino a la capital del
Cesar, donde lo esperó en el aeropuerto un operativo dirigido por el coronel
Freddy Delgado, comandante de la institución en Valledupar, para ingresarlo al
penal de alta y mediana seguridad donde permanecerá mientras avanza la
investigación y llega a juicio por los hechos ocurridos el sábado anterior.
A la 1:15 de la tarde
de este miércoles fue ingresado a la cárcel donde fue recibido por personal del
Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec, en cumplimiento de la
medida de aseguramiento intramural que en este centro dispuso un juez ambulante
Bacrim con funciones de control de garantías.
El togado decidió
enviarlo a ese centro de reclusión, también conocido como ‘La Tramacúa’ por su
tamaño, teniendo en cuenta que ofrece las garantías de seguridad máxima para el
imputado mientras espera el inicio de las audiencias preparatorias.
En la audiencia de
imputación de cargos, Cristian Camilo Bellón Galindo, no aceptó los cargos por
los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio agravado, terrorismo
agravado, porte de armas de fuego, municiones y explosivos, utilización ilícita
de redes de comunicaciones y delitos contra la vida e integridad emocional de
los animales, que le imputó el fiscal 11 de la URI, Rodrigo Restrepo.
Tras llegar a
Valledupar, Bellón fue trasladado a la penitenciaría fuertemente escoltado en
una camioneta de la Policía, por motorizados de la institución y efectivos del
Escuadrón Móvil Antidisturbios.
El coronel Delgado
indicó que “se hizo el traslado del aeropuerto de Valledupar hasta la
penitenciaría con las medidas de seguridad necesarias para evitar contratiempo
en el desplazamiento; lo que sigue ahora es la parte investigativa, las
pruebas, el acervo probatorio que tiene la Policía Judicial es importante para
que esta persona responda por los hechos”.
El traslado hasta el
penal se hizo en medio de un completo hermetismo y de forma rápida. “Revisamos
todo el esquema de seguridad para que la vía estuviera limpia y no tener ningún
inconveniente en la seguridad tanto del detenido como la de nosotros, por el
riesgo grave que presenta este tipo de personas en el desplazamiento más que
todo”, puntualizó el oficial.
Desde Barranquilla,
Yeison Manco López, el abogado del bogotano Cristian Bellón Galindo, había
manifestó que la investigación adelantada por la Fiscalía iba de manera rápida
y que la defensa frente al caso “apenas comenzaba”.
Indicó que la familia
del señalado lo contrató de manera “accidental” y aclaró que no conoce a
Cristian Bellón, tal y como se había ventilado inicialmente.
En la audiencia de
imputación de cargos celebrada el pasado martes 30 de enero, el fiscal 11 de la
Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía leyó ante el juez penal municipal
con Función de Control de Garantías Ambulante Bacrim, Ricardo Méndez, lo que el
indiciado había dicho en el interrogatorio en la URI una vez fue detenido tras
los bombazos del barrio San José.
“Llegué de Bogotá el
día 13 a disfrutar del Carnaval y a buscar trabajo en esta ciudad”, leyó el
fiscal de la respuesta de Bellón.
“Vive en Soledad en una
pieza, que tiene solo una colchoneta, que alquiló a 100.000 pesos en una
dirección que no conoce, a una pareja que no sabe cómo se llama”, parafraseó el
fiscal Restrepo.
“Que usted salió de
Soledad ese sábado para el centro de Barranquilla a comprar ropa y que cogió un
bus y se bajó por unas bodegas de la calle 30 y empezó a caminar, porque
todavía era muy temprano para llegar al centro, y que por eso iba pasando por
la estación San José y ahí me capturaron de manera injusta porque yo solo iba
caminando”, continuó compartiendo la versión de los hechos del capturado.
“Admitió tener en su
poder el radio Yaesu de telecomunicaciones que se lo había prestado un pariente
lejano para buscar empleo como vigilante y que si iba a trabajar ahí tenía que
comunicarse con un radio donde fuera a pedir las solicitudes de empleo y por
eso lo tenía”, finalizó.
Posterior a esto, el
fiscal procedió a desmontar cada una de las justificaciones del imputado. La
Fiscalía tiene un recibo de un pasaje de bus que demuestra que Bellón llegó
procedente de Cúcuta.
En total, la Fiscalía
conoce, a través de la libreta de apuntes que el capturado llevaba, que gastó
$2.077.000. Entre los gastos se encuentra la compra de puntillas, PVC, goma,
guantes de látex y uniformes.$1.020.000 de este dinero fue gastado en tres
radios que había comprado en un local de Fedecafé en conjunto con Jefferson
Torres Mina. El comerciante que vendió los transmisores recordó a la pareja de
hombres por la forma de caminar de Torres, que todavía se encuentra huyendo.